Óleo de Óleo de Antonio Gutiérrez de la Rosa
Saboreo el chocolate
y me impregna su dulzura,
ese aroma que perdura
sin que nadie lo arrebate.
Lo siento ya derretido
halagando toda mi alma,
es emoción que da calma
tras haberse consumido.
Brota saciado el placer
en salvaje sensación,
heredo su curación
volviendo en risa a nacer.
Golosa clavo un mordisco
me penetra el olor suave,
el azúcar es la clave
de un impulso tan arisco.
Su textura me transmite
lo meloso de la crema,
se derrama como yema,
fundiendo cada confite.
Así aguardo muy ansiosa
repetir este prodigio,
que con sabor da prestigio
a golosina sabrosa.
***Huella del aire***
y me impregna su dulzura,
ese aroma que perdura
sin que nadie lo arrebate.
Lo siento ya derretido
halagando toda mi alma,
es emoción que da calma
tras haberse consumido.
Brota saciado el placer
en salvaje sensación,
heredo su curación
volviendo en risa a nacer.
Golosa clavo un mordisco
me penetra el olor suave,
el azúcar es la clave
de un impulso tan arisco.
Su textura me transmite
lo meloso de la crema,
se derrama como yema,
fundiendo cada confite.
Así aguardo muy ansiosa
repetir este prodigio,
que con sabor da prestigio
a golosina sabrosa.
***Huella del aire***